COMPARTIENDO NUESTRO ESPÍRITU…Hoy Yamila Moreno

Aquí descubrirás a personas que han querido buscar algo más, han tenido valor y han dado el paso atreviéndose con el reto de cambiar de vida. Desde KSchool queremos demostrar que cualquiera puede encontar su camino.

Un ejemplo de que sólo se necesitan ganas es Yamila Moreno, programadora de profesión y una mujer con ingenio que ama su trabajo. Estudió filología hispánica y un buen día decidió que lo suyo era la programación, ahora trabaja en Kaleidos, una empresa joven que apuesta por el talento y la creatividad. Como ella dice «hay que formarse, por supuesto, pero también hay que atreverse, ser flexibles y buscar un trabajo que nos motive».

¿Cómo llegaste a ser programadora después de haber estudiado filología?

Filología hispánica fue siempre mi vocación; desde pequeña era ávida lectora así que siempre tuve claro lo que quería estudiar. Sin embargo, nunca me quise dedicar a la docencia así que cuando estaba terminando la carrera busqué opciones cuyas salidas laborales me encajaran. En ese momento apareció la programación.

¿Qué te impulsó dedicarte a esto?

Llevaba tiempo curioseando con la informática, y tuve la suerte de contar con un buen amigo que hizo las veces de mentor. Me sugirió que estudiara programación, y aunque al principio no lo tenía claro, en seguida vi que había sido una opción genial; fue un cambio importante que llegó en el momento preciso.

Formas parte de Kaleidos,¿desde hace cuánto?

El equipo tiene ya unos cuantos años y los compañeros nos conocemos bien. Kaleidos como empresa es muy joven, ¡3 meses!, así que tengo el privilegio de haber asistido a su nacimiento. Es un proyecto muy motivador y estamos todos muy ilusionados.

¿Qué tipo de proyectos llevas a cabo en Kaleidos? ¿Cómo es tu día a día?

Algo que me encanta es que cada proyecto y cada cliente son distintos. Tan pronto hacemos un mega-portal para la administración pública como una aplicación para médicos o una web de másteres de analítica web. Como en Kaleidos tenemos una estructura muy horizontal, en el día a día me pueden tocar tareas muy diversas: hablar con el cliente para definir requisitos, trabajar con los equipos de UX o diseño creativo de Secuoyas sobre cualquiera de los proyectos que tenemos en común, y por supuesto, programar, que es a lo que me dedico sobre todo.

¿Qué importancia das a la tecnología en tu vida diaria?

En mi vida intento darle la importancia justa. Para mí es una herramienta para estar mejor informada, para disfrutar de más ocio, para estar mejor comunicada… está al servicio de mi felicidad, que es de lo que se trata.

¿Cuántos años llevas trabajando como programadora? ¿Cómo ha evolucionado o cambiado el sector?

Llevo unos 5 años, que es poquito tiempo, aunque he aprendido muchísimo y cada día sigue siendo un reto. Muchos días siento que apenas acabo de empezar: nuevas tecnologías, nuevos proyectos… A mí me encanta, porque siempre ando aprendiendo y evolucionando. Sobre el sector, mejor dejo que otros con más trayectoria hablen 😉

¿Qué recomendarías a alguien que quiera cambiar de profesión?

En mi caso me vino fenomenal despejar algunos prejuicios que tenía; pensar en que jamás había hecho algo parecido, en cómo competir contra universitarios con carrera de informática, o con mucha experiencia… Hay que formarse, por supuesto, pero también hay que atreverse, ser flexibles y buscar un trabajo que nos motive.